LECCION XXI
"De los diáconos"I. El significado del término:
1. En general. "Diácono" significa dependiente, sirviente, ministro. Se deriva de la voz griega "diako" que quiere decir correr o apresurarse. La idea radical de la palabra "diácono" es servicio activo. En este sentido general incluye:
(1) Evangelistas (Efes. 6:21; Col. 1:7; 1ª Tim. 4:6)
(2) Cada uno y todos los siervos fieles de Cristo (Juan 11:26)
2. Especialmente. De la asociación de la palabra con el oficio y trabajo de los ancianos u obispos, es evidente que la palabra "diácono" se usa también en un sentido oficial.
(1) Fil. 1:1. Aquí los obispos y los diáconos se distinguen de los santos en general.
(2) lª Tim.3: 8-13. Asociación de un grupo especialmente calificado con los ancianos en este pasaje indica un oficio regularmente constituido o establecido.
II. Su posición y trabajo como se ve de:
1. El significado de la palabra "ayudador" " ministro". En contraste con la palabra obispo, que significa "superintendente" el diácono es un ayudante o siervo de la iglesia, bajo la supervisión y como ayudante de los obispos de la iglesia.
2. Hech. 6:16. De este pasaje observamos:
(1) Estos hombres fueron seleccionados para relevar a los apóstoles de sus deberes seculares y responsabilidades, a fin de que ellos pudieran dedicarse más plenamente a las materias espirituales.
(2) Estos hombres fueron elegidos por la congregación y nombrados por los apóstoles.
(3)La consumación del trabajo para el cual fueron elegidos constituyó la medida plena de su responsabilidad especial.
III. Sus cualidades:
1. 1ª Timoteo 3:8-13.
(1). Gravedad.
(2). Sin doblez.
(3). No dados a mucho vino.
(4). No codiciosos de ganancias deshonestas.
(5). Manteniendo fa fe en una conciencia pura.
(6). Probados.
(7). Maridos de una mujer.
(8). Gobernado a sus hijos y sus hogares bien.
2. Hechos. 6:1-6
(1). "Un hombre de buena reputación" dentro y fuera de la iglesia.
(2). "Lleno del Espíritu Santo", llevando buenos frutos en la vida (Gálatas 5:22-24)
(3). "Lleno de sabiduría ". Hombre prudente y de sano juicio.
Conclusión:
En general, un diácono debe el mismo servicio al Señor y lleva la misma responsabilidad que todo cristiano. Él, sin embargo, es uno sobre quien descansa una responsabilidad especial. La iglesia, al igual que todas las instituciones en este mundo, necesita de líderes. Hombres sobre quienes pueda descansar una responsabilidad especial sin que ellos se achiquen para evadirla, sino que muestren un grado sobresaliente en las cualidades que constituyen el carácter cristiano real.
© 1999 Iglesia de Cristo de Sevilla